Claudio, mi tío Francisco y el dejar fluir



Debo aprender también de Claudio, jamás lo escuché despotricar sobre alguna decisión que hubiese tomado. No hace alarde de lo bueno, pero lo tiene siempre presente. Lo malo parece no recordarlo. El tipo se enfoca sobre los aspectos positivos.

Mi tío Francisco, que no era precisamente un filósofo, también decía que siempre había que mirar hacia delante. La sabiduría popular nos alcanza a todos.

Yo tengo la costumbre de recriminarme todo aquello que me haya salido mal, aunque al momento de haber decidido un camino era imposible saber exactamente hacia dónde me conduciría.

No está mal tener un plan, un plan B y hasta un plan C, pero no se puede estar pensando todo el tiempo en ellos. La gracia de tener un plan es justamente haber determinado de antemano qué se hará, si no ¿para qué tenerlo? Por otra parte, la vida va para dónde va y generalmente poco y nada puede hacerse para modificar los resultados, así que la mejor conducta parecería ser el dejar fluir los acontecimientos.



Comentarios

  1. Se podría pensar que lo fácil es dejarse llevar, dejarse fluir por esos acontecimientos que surgen en nuestra vida, pero al menos en mi caso, eso sería lo difícil, pues soy inconformista nata, una luchadora siempre que puedo o me dejan…y, aunque me considero un ser líquido que me adapto a todo o casi todo, hay cosas por las que sin ninguna duda no me dejaría llevar, sabiendo que a veces, lo sensato sea lo contrario…

    Un placer visitarte, Marc.

    Bsoss.

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    Respuestas
    1. Gracias estimada.
      Yo creo que es difícil dejar fluir. Diría que lo más difícil, al menos en la mente. Pero bueno, son formas de sentir.
      Besos y muchas gracias

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